jueves, 8 de noviembre de 2007

MARATON DE NEW YORK 2007




Joan, yo, Carles y Fernando

Suenan los acordes del “Star Spangled banner” y tres soldados se cuadran a escasos metros de Carles Farré y yo entre el rugido de los rotores de siete helicópteros que sobrevuelan nuestras cabezas. Es Domingo 4 de Noviembre de 2007 y nos encontramos en la línea de salida situada en el puente de Verazano-Narrows. Esto es la Maratón de Nueva York !!!!!

Previamente, a las 4:30 de la mañana, sonaba el despertador en un Hotel de la calle 32 st situado entre la 5 y la 6 avenida. El día antes, tanto Carles (73 maratones disputadas) como yo, habíamos dejado todo preparado encima de la silla de la habitación incluyendo la camiseta, el dorsal, calcetines, chip, ropa de abrigo.

Carles está preocupado por la lesión de tendón que arrastra. El hecho de haberla disputado en años precedentes no le impide que tenga la ilusión de un debutante y finalmente decide tomar la salida para disfrutar de la prueba andando. Todo un ejercicio de pundonor para alguien que atesora una marca de 2:33’.




Entrada zona de corredores


Bajamos a la recepción, son las 5:15 de la mañana y el grueso de la expedición está presente. El comedor del hotel no está abierto por lo que nos comemos unas barritas y unos yogures facilitados por Joan y Fernando que nos ayudan a desatar el nudo del estómago.

Tenemos que darnos prisa porque el acceso a Staten Island se cierra a las siete de la mañana. El transporte más seguro para acceder a la línea de meta es el metro combinado con el ferry y los autobuses previstos por la organización.

El maratón se caracteriza por un recorrido que atraviesa los cinco condados del Estado de New York y que son Staten Island, Brooklyn, Queens, Bronx y Manhatan.

Cerca del Hotel hay una entrada de metro y todos no dirigimos hacia allí sin más dilación. No hace mucho frío y la mañana parece que será serena. Tomamos el metro de la línea W que nos lleva hasta la parada de Whitehall St Terminal, de donde parte el ferry gratuito que es utilizado a diario por nos newyorkinos para desplazarse entre Manhatan y Staten Island.

Diversas oleadas de corredores van llegando, y según llegan se sientan en el suelo del terminal. Es una zona amplia, cubierta y que dispone de lavabos públicos.

Son las 6:15 de la mañana y el primer ferry abre sus puertas a los corredores. El ferry parte sin demora y durante el recorrido, el capitán varía la ruta normal de navegación para gratificar a todos los corredores con una visión preferente de la estatua de la Libertad. El trayecto no dura más de 25 min y llegamos finalmente al terminal que se encuentra al lado del estadio de Béisbol de los Staten Island Yankees. Abandonamos ordenadamente y sin prisas el ferry. Todo está previsto. Un sinfín de autobuses situados a la salida del terminal van acomodando a los numerosos corredores para conducirlos hasta la línea de salida situada en la antigua base militar de Forth Wadsworth, hoy reconvertida en zona lúdica ubicada a los pies del conocido puente de Verazano-Narrows.

Son algo más de las 7:10 y nos encontramos ya a la entrada de las barreras de acceso a la zona de salida. Numerosos voluntarios y policías nos recuerdan que debemos mostrar el dorsal para acceder a la zona reservada a los corredores.

Los carteles instalados por la organización nos conducen sin ninguna dificultad hasta los box de salida. Diferentes colores identifican las tres zonas de salida (azul, verde y naranja). Cada una de estas zonas está perfectamente segmentada en cajones en función del número del dorsal del corredor.

Una ingente cantidad de lavabos portátiles dispuestos en línea, nos recuerda que aquí todo se hace a lo grande.

Quedan 2:30 h hasta la hora prevista de salida !!. Parece que el tiempo se resiste a avanzar, sin embargo todo está previsto. La organización pone a disposición del corredor cafés, tés, agua, refrescos y sobre todo bagels. El bagel es un pan de trigo con forma de donut que primero se cuece en agua y luego se hornea. Ello le confiere una superficie crujiente y un interior esponjoso. Acompañado de un café caliente entra de maravilla !!

No hay prisa. La organización tiene prevista una hilera de camiones de UPS (Union Postal Service) identificados por números de gran formato. Tú dorsal, recogido el Viernes en el Jacobs Javits Convention Center (11th Av adn 38th st), te indica en que camión tienes que entregar la bolsa transparente que contiene tus enseres. No está permitido meter bolsas de mano en el interior de las mismas ni utilizar otras bolsas que no sean las entregadas por la propia organización. Nada está dejado al azar. Todo está explicado en la documentación.

Faltan tres cuartos de hora y la gente empieza a moverse. Se hacen las últimas fotografías y aumenta frenéticamente la actividad a los pies de los camiones de la UPS. La gente se desprende de sus ropas de abrigo y las guarda en la bolsa de plástico para ser entregada a los voluntarios situados a pies de los camiones. Muchos llevamos prendas de abrigo que luego tiraremos y que servirán para la beneficiencia (hasta eso está previsto).

Parece que llega el momento y nos movemos hasta la línea de salida. Faltan diez minutos y prácticamente todo el mundo se encuentra en los cajones. Nos desplazamos en un movimiento en masa controlado hasta ocupar la salida en el puente. Ya todo está dispuesto, suena el himno y se produce la presentación por megafonía de los corredores ...Lel, Goumri, Baldini (las chicas salen un cuarto de hora antes). Al poco tiempo se desata la salida entre los acordes del New York, New York de Sinatra.

Son los segundos previos,....el día antes había fallecido el atleta americano Ryan Shay de 29 años disputando los trials para los juegos olímpicos de 2008 cuyo circuito consistía en dar unas 5 vueltas al central Park, ....en tu interior le dedicas un recuerdo y piensas que justamente ayer él se encontraba en tu misma situación. Es una pena pero no queda tiempo y la vida sigue ocupando el espacio-tiempo de forma imparable.


Ryan Shay
Empezamos a correr y pisamos la alfombra roja del Yellow Chip (El chip amarillo es perfectamente válido para correr en NYC) la carrera está lanzada !!!
No todos los grupos de colores recorren el mismo trazado en las primeras millas del circuito e incluso en mi caso, al encontrarme dentro del grupo verde, la organización nos da la salida 2 minutos más tarde que al resto. Con esta medida pretenden descosgestionar la ingente cantidad de corredores que atraviesa el puente en obras.
La gente aprieta y empezamos a correr. La primera milla cae en 7’45” !!! Jejeje, todo está marcado con millas ( 1 milla = 1610 metros) y en cada milla hay un cronómetro. Además ocurre los mismo con los kilómetros 5, 10, 15, 20, media maratón, 25, 30, 35 y 40. Es importante tener una idea del ritmo que tienes que llevar por milla. En mi caso el objetivo es 6’45’.

He empezado lento a causa de la marea humana, pero intento recuperar el terreno perdido rápidamente. Pasado el puente entramos en Brooklyn y empezamos a sentir los primeros alientos de la gente. Empiezo a corre bien y paso el km 5 en 19’37”. Las sensaciones no son malas después del parón provocado por una sucesión de semanas difíciles de trabajo. La marea humana se aclara, pero sólo es un espejismo. Al llegar a Bay Ridge Ave nos juntamos con los corredores del grupo azul que había salido 2 minutos antes y nuevamente se complica el avance. Llegamos al primer puesto de avituallamiento y empiezan las batallas por hacerse con uno de los vasos facilitados por la organización. (En NY utilizan vasos de Gatorade o de agua y hay muy pocos avituallamientos sólidos por no decir que 1 o 2 situados al final de la prueba). Paso el km 10 en 39’18”.


corriendo por la calles de NY

Llegada a la milla 7 oigo una voz conocida, es Joan Boada que grita mi nombre, VíctorGo corre a su lado acompañando a un componente de 26.2.

El perfil acumulado hasta ahora es ondulado. Las sensaciones siguen siendo buenas y hacia la milla 8 nos adentramos en el barrio residencial de Queens. Paso el km 15 en 59’35’ y enfilo ya la media maratón a la cual llego en 1h 24’ . La alfombra de la media maratón está situada en la pendiente de subida del Puente de Pulaski. Ligera bajada y giro brusco a la izquierda para buscar la milla 14 situada en Vernon Blvd. Poco a poco el perfil se va endureciendo según nos aproximamos al puente de Quensboro para adentrarnos ya en Manhattan. Parece que Queens se resiste a despedirnos sin darnos un regalito de despedida en forma de pendiente pronunciada....puff...me doy cuenta que he tardado 7’45” en correr la milla situada entre la 15 y la 16... Las piernas me empiezan a doler pero la moral aumenta al empezar a correr por las calles de Manhattan.

Los grupos musicales y las personas situadas a cada lado del circuito no cejan en su empeño de “empujar al corredor”. En ese detalle se parece bastante a Berlín. A veces, una humareda de procedente de un "chiringuito" cercano te inunda los pulmones con aromas de comida refrita.

Empezamos a correr por la 1st Ave de Manhattan....en una recta en subida contínua de 4 millas....Pienso que tengo margen para el Sub 3 y ello me tranquiliza e intento correr con la cabeza. Las piernas pesan y cada vez me duelen más . Paso el km 30 en 2h 03’. Al final de la First Ave. Pasamos el puente de Willis Ave y nos adentramos en el Bronx. Aquí parece que la carrera pasa más desapercibida pero rápidamente pasamos por el puente Madison y nos volvemos a incorporar a Manhattan. Una pantalla gigante nos da la bienvenida y podemos observar nuestras caras de sufrimiento en directo.Paso el km 35 en 2h 26’. Noto que estoy bajando el ritmo...pero el perfil no para de subir aunque pienso que todavía tengo margen. No quiero hacer la machada y estrellarme en los kilómetros finales. Intento ser conservador en las subidas y me reservo para la entrada en Central en Park. Según voy corriendo noto como me duelen cada vez más las piernas y pienso también en Florencia......(no la voy a correr!! no la voy a correr!!!)

Llegada la milla 23 y oigo a VictorGo dando ánimos a un componente de los 26.2 a mis espaldas, es la señal pienso (además no quiero salir por la Tele)....y aumento mi ritmo llegando rápidamente a la entrada del Central Park.

Hace bastantes millas que no cojo ningún refrigerio.... ya no quiero perder ningún minuto más.....sé que puedo llegar y lo voy a hacer.
La entrada en el Central Park es espectacular y a la vez dantesca porque la gente ya corre más con la cabeza que con las piernas.

Avanzo a muchos y sigo a ritmo frenético hasta alcanzar el km 40 en 2:48. Se que ya tengo el Sub 3 en el bolsillo y eso me hace disfrutar como nadie de los últimos kilómetros. Llego a la zona de 57 St, en donde se encuentra el límite sur del parque y giro a la derecha. El griterío es impresionante y empiezo a oler la meta.....un poco más un poco más y vuelvo a girar a la derecha para encarar al entrada a meta.....YA ESTA, YA ESTA. THAT’S IT !!! Al final 2:58’40’’.


Esta vez no me embarga ninguna emoción especial. Como se ha dicho muchas veces, tus logros quedan en nada si no tienes a alguien a tu lado con quien compartilos, pero aún con todo, estoy satisfecho. He acabado mi maratón nº 10.


A la llegada espero a Víctor y me lee la cartilla por el “hachazo”. Tiene razón, pero pienso que los kilómetros finales nos pertenecen individualmente a cada uno de los corredores y tanto el sufrimiento como las satisfacciones son personales e intransferibles.
Aquí van los parciales:


OfficialTime: 2:58:40
5KTime:0:19:37
10KTime:0:39:18
15KTime:0:59:36
20KTime:1:20:12
1/2 Mar.Time: 1:24:44
25KTime:1:42:02
30KTime: 2:03:49
35KTime:2:26:16
40KTime:2:48:56
Pace/Mile :6:49 min/mile


NOTA: Los camiones con tu ropa te esperan a pocos metros de la llegada y puedes volver al hotel en metro (gratis para los corredores). Si tienes el Hotel cerca de Central Park, entonces puedes volver andando.



vista Central Park desde Rockefeller Center